viernes, 2 de agosto de 2013

Muerte al disco duro

La frase, 'muerte al disco duro', lo repetíamos constantemente en las reuniones que teníamos en 2001 sobre el proyecto eiwork.  La idea que quería transmitir es no tener la información local, sino en Internet   Sí, justo lo que hoy se dice con las aplicaciones en la nube, o más técnicamente 'cloud computing'. En aquellos tiempo esta terminología no existía. Usábamos el acrónimo ASP (en inglés Proveedor de Servicio de Aplicaciones), que pronto cayó en desuso debido a que Microsoft llamó también asp a una tecnología de desarrollo en Internet con un significado distinto.  Otra alternativa fue posteriormente el término Sass.

Se llame como se llame, la idea está clara. Usar el ordenador local como acceso y ejecutor de aplicaciones, pero tener el servidor en Internet.  Aunque ahora parezca obvio en 2001 era difícil de defender.   La idea ya ha vencido en el mundo informático, pero no así en la Pyme y por eso escribo este artículo, para exponer de forma fácil los argumentos para 'matar al disco duro'.

Nuestro primer cliente en la nube fue en 2003.  La experiencia no fue mala pero a los pocos meses se le instaló un servidor local porque el cliente requería más velocidad.  El segundo fue al año siguiente, 2004, y  desde entonces ha estado funcionando en la nube.  Ya en 2008 vimos que la velocidad y disponibilidad permitían aconsejarlo.

Voy pues a enumerar las ventajas de trabajar con aplicaciones en la nube.

En primer lugar nos ahorramos un sistema informático con servidores y determinados recursos. Solo debemos tener PC y una conexión buena a internet. Ambas cosas son baratas hoy en día. Mucho más que un servidor en condiciones.

Se facilita los accesos desde otras localizaciones.  Si alguien quiere puede trabajar desde casa.

El mantenimiento se simplifica enormemente.  No hay nada relevante ni costoso en la instalación local.