viernes, 31 de agosto de 2012

Más allá del ERP

ERP son las iniciales de 'Enterprise Resource Planning' es decir, en castellano, Planificación de Recursos de empresas.  Detrás de esa nomenclatura se encuentra la invocación de un conjunto de aplicaciones que pretenden informatizar de forma eficaz y global una empresa. 

Para muchos ERP es sinónimo de 'software de máxima calidad'. Y por eso, y porque no existe una concreción científica de las características de un ERP, muchos fabricantes de aplicaciones de gestión se han unido a la moda y cuando querían decir que su producto era muy bueno decían que es un ERP.  Abundan los folletos que hablan de un ERP que no parece que encaje para nada en lo que entendemos muchos por un ERP.

Aunque como digo no disponemos de una definición exacta, hay algunas características que parecen claras, como una base de datos centralizada a nivel lógico, evitar duplicidades de información entre los distintos programas, una planificación de los procesos que se informatizan, una vocación de globalidad en la gestión y algunas cuestiones más de calidad. Si quieres concretar más lo que es un ERP puedes consultar el correspondiente artículo de Wikipedia: http://es.wikipedia.org/wiki/Planificaci%C3%B3n_de_Recursos_Empresariales

La idea que más me interesa y que de alguna forma quiero rebatir es que para muchos los ERP actuales son el paradigma de la buena informática empresarial.  Una empresa que pueda debe colocar un ERP y si no lo hace es porque no puede. Eso dicen muchos informáticos de prestigio.  Por mi parte considero que en realidad el software de futuro es el que está dando paso por delante de los ERP.  Frente a la 'Planificación de recursos de la empresa' yo pongo el 'Aprovechamiento de todo tipo de recursos'.  Hace años que en ESTUDIO INFORMATICA a nuestra principal aplicación de gestión la llamamos software del tipo ERP+CRM y con esa palabra 'tipo' queremos indicar que queremos dejar atrás esa etiqueta.  No me atrevo a dar un nombre nuevo porque eso dependerá de muchas circunstancias. Nuestro primer CRM nació mucho antes del término. De aquella historia y del exceso de terminología hablaré otro día.  

Como curiosidad diré que los antecesores de los ERP eran los sistemas llamados MRP y MRPII.  Leí un texto donde el autor defendía el paso a la nomenclatura ERP .... ¡debido a la mala fama de los sistemas MRP!.

Bajo el paraguas del término ERP se han recogido algunas ideas importantes de la informática empresarial, tales como la base de datos centralizada. Con eso se resolvía uno de los grandes problemas de la informática de finales del  siglo pasado, el problema de las hojas de cálculo.  Intentaré explicarlo sin quitarle su valor a ese tipo de herramientas. Las hojas de cálculo permitieron que cualquier ejecutivo, mando intermedio o empleado de una empresa pudiera organizar unos datos para resolver aglunos de sus problemas de gestión.  Maravillas.  Lo mismo que el procesador de texto hizo que cada uno pudiera escribir con las hojas de cálculo en media hora se organizaba uno para por ejemplo gestionar las facturas pendientes de cobros.  Uno pedía un fichero con esas facturas, las copiabas a su hoja de cálculo y se ponía a llamar a los clientes, visitarlo, etc.... ¡Con qué facilidad se solucionaban algunos problemas! pero ... ¡Con mayor facilidad se creaban otros!. Porque claro, está llamabas al cliente y si había pagado no lo sabías. Si te lo decía, o te lo creías o tardabas en averiguarlo todavía más que cuando te enviaban listados arcaicos de impresoras.  Si te equivocabas al teclear un dato en la hoja de cálculo (ejemplo, escribir en una casilla una línea más arriba) se podía generar una falta de información que requería varios días y personas para aclararse. Que sí, que fulanito pagó la factura, ¿no ves que lo tengo anotado?. Y el ejemplo paradigmático eran las reuniones de ejecutivos dónde al abrir un turno de palabras para discutir las ventas de la nueva división de la empresa cada uno de los directivos ... tenía un valor distinto en su hoja de cálculo. El problema de las hojas de cálculo pasó a las bases de datos (como Access) con la suerte de que al ser más complicadas en su uso no proliferaron tanto.   Pero en España aún no ha sido desterrado y es causa de una falta de eficacia importante en muchas empresas.  Posiblemente merezca que le dedique todo una publicación en este blog más adelante.

Decía que los ERP resolvieron algunos problemas como el que acabo de citar y además marcaron cierta distancia con el mal software. Eran aplicaciones más serias y presumían de su eficacia (aún así la literatura admitía que entorno al 40% fracasaban en su instalación)