viernes, 25 de mayo de 2018

Complicarse la vida a base de cosas sencillas

Recuerdo una aplicación de contabilidad de las que presumía como muchas de 'No hace falta saber contabilidad' y ser lo más sencillo del mundo.  He conocido muchas parecidas, que pretendiendo simplificar las cosas, complicaban la gestión de una empresa a unos niveles poco aceptables.  

Hay una frase atribuida a Einsteins (una más entre muchas, sí) que me gusta citar a menudo. Es más ya la he citado un par de veces en este blog.  La frase dice así:

Todo debe hacerse tan simple como sea posible, pero no más simple  

Y ahora voy a contar lo que pasó con ese programa de contabilidad.  Su 'facilidad', el motivo por el que no era necesario saber contabilidad, era que te salía un lista de asientos, decías lo que era y rellenabas unos datos, ¿sencillo? ¿no?  Pues no, veamos.

Vas a contabilizar un papel.  Te sale la lista de opciones y una de ellas tiene la leyenda 'Factura de compra con un único tipo de iva'. Guay, Lo eliges, te pregunta la base, el iva, el proveedor y todo listo.  Hasta aquí sencillo. 

De eso presumía un cliente que hicimos, antes de que lo captaramos.  Al poco tiempo presumía de que le habían incorporado un nuevo tipo de asiento que necesitaba: Facturas de gastos con retención.   Un poco después tenía otro tipo nuevo, la factura de gastos con dos tipos de iva y retención.  Pasó el tiempo y le pusieron otro tipo más y ...

Y a la tercera le vendimos nuestra aplicación.  Cuando se la instalamos me enseñó lo complicado que era meter un asiento en su programa fácil.  Tenías más de mil tipos de asientos 'fáciles'.

¿Ibas a meter fácilmente una factura recibida? Pues nada, eliges facturas de gastos (o de compras, hasta ahí vale) y luego ves una lista de casi un centenar de opciones, de tal gastos, sin iva , con varios ivas, con retención, con domiciliación, etc.

Total que para meter un asiento necesitaba media hora para elegir cual de los tipos fáciles era el correcto.

Tengo muchos más ejemplos.  Hay que buscar la sencillez al máximo.  Pero no más del máximo posible.